Tras unas horas de cervezas con amigos, me dije en el trip de camino a mi casa en el auto "Voy a llegar y voy a escuchar The Pros and Cons of Hitch Hiking de principio a fin". Dicho y hecho llegué a mi pieza, le di play a la obra maestra y, tras la primer canción entendí que me tendría que despojar de todo lo exterior para meterme de lleno; la canción misma me lo demandaba. Así es como tiré mi colchón al suelo, acerqué una botella de agua y mi pastilla del resfrío, para asegurarme de tenerla a mano, apagué las luces y conecté los auriculares; toda esa movilización para escuchar un disco! Créanme, la música obra de maneras misteriosas. Hacía mucho tiempo que no escuchaba un disco de esta manera y el haberlo hecho con The Prons and Cons... volvió esta situación en uno de los eventos más intensos que tuve en mucho tiempo. Este viaje, que va desde las 4:30 hasta las 5:11 a.m., te lleva por todo lo que corre por la cabeza de un cuarentón que empieza a dudar un poco de todo en medio de la ya harto conocida crisis de los cuarenta. A lo largo del viaje, vivimos las mismas aventuras que corren por la mente de aquel tipo: el tirar el trabajo y todo lo demás al carajo e irse con la esposa e hijos al campo, dejar la esposa e hijos y agarrar la ruta, tener un affaire con ESA mina. Todo para luego despertar con miedo de que su chica, la que siempre estuvo ahí, no estuviera a su lado en la cama y terminar tocándole los cabellos para ahuyentar aquel triste sentimiento. Terrible.
Twenty One parece ser un disco más, un disco del montón. Ya saben,
la bandita de canciones indie con guitarras afiladas y coros que se te pegan en
medio de lo que pareciera el más representativo de los ejemplos de la inercia. Y Twenty
One es eso; inercia, canciones que se suceden con naturalidad en un paseo íntimo por
nuestro propio existencialismo.
No busquen vueltas, acá la ingenuidad no es aparente; Twenty
One es una ofrenda, un disco que nos abre gentilmente las puertas de par en par para que lo
conozcamos. Si después de todo, es un disco más. Se pueden sentir como los ’60
y los ’80 se mezclan con el nuevo milenio en una pequeña obra que encontraremos
agigantada una vez finalizada, con 10 canciones que pasan fugazmente haciéndonos
sentir tanta dicha como tristeza, en donde la melancolía, aquí escrita en
mayúsculas, se hace real y palpable.
Twenty One llega y se va, como un disco más. Pero ya nada será lo mismo.
Debo confesar que tengo una debilidad por los pianistas clásicos y recientemente estuve viendo unos videos de
Evegny Kissin en vivo. Siempre me despierta curiosidad imaginar la vida de un
pianista, como funcionan sus mentes, que imagino como estos laberintos intricados y
complejos. Todos estos tipos tan silenciosos, los puedo ver en cuartos oscuros
medio derruidos, con pisos viejos de madera, obviamente con el piano y una
ventana que no necesariamente da hacia una vista agradable.
En fin, quiero rescatar dos
piezas en particular que ejecuta Kissin, uno de mis favoritos. La primera es La Campanella de Liszt.
Miren a Kissin, en su mejor momento, en una filmación del '97. Él, aún
adolescente, es un terrible rockero. Tiene un peinado que remite directamente a
Robert Smith y toca con una ferocidad que te deja pasmado. Es increíble ver la
intensidad de sus expresiones y movimientos, las gotas de sudor que le caen de
la frente, y ni hablar de la maestría con la que ejecuta La Campanella… esta
versión es insuperable, no he encontrado otra mejor.
La segunda es Rondo e Capriccio,
de Beethoven. Una pieza realmente increíble, totalmente imperfecta, te hace
pensar que el gran Ludwing se estaba tomando todo para la joda, como diciendo
“Miren lo que hago, porque se me canta!”. Parece como si la consecución de las
notas no tuviera ningún sentido en lo absoluto. No obstante es sin dudas una de
las mejores cosas que escuché en mi vida.
Más allá de que hayan sido los disparos y las cajas registradoras los que la hicieron famosa en Kala (2007), M.I.A. ya había compuesto su tour de force en Arular, su tremendo disco debut que desafía todas las fronteras y etiquetas posibles. Dijeron que es pop, pero hay que ser sordo para comprar: esta música es un collage caótico y quebrado, compuesto a base de esos beats que parecen venir de todas las esquinas del mundo y los gritos de resistencia tamil de la cerebral Arulpragasam, que esta llena de energía y actitud. Un disco infaltable en la colección Alpha Beta Gaga.
Una de las cuentas pendientes era retomar el ciclo 10 Discos Internacionales. Todavía nos queda tela para cortar para rato, especialmente si están descargando y escuchando los discos que proponen estas extravagantes personalidades que les voy presentando lista tras lista. Dicen que lo bueno viene de a dos, les traigo entonces las listas de mi amigo Fede y su chica Vere. Fede es un muchacho de Buenos Aires, un verdadero amante de la música con una clara inclinación por la proveniente de las Islas Británicas. A pesar de que trastabilla un poco con su costado pasional por "el rojo", equipo de sus amores en el balonpié, es un chaval muy querible. De Vere, honestamente, sé poco y nada, pero es una muchacha que entró en el mundo de Fede, y eso ya es dato suficiente. De todos modos acá tenemos su lista como para conocerla mejor. Claro, como dije antes, la música que elegimos muestra algo de nosotros mismos. Las damas primero entonces:
Vere
Muse: "Absolution"
The Killers: "Sam's Town"
The Strokes: "Room on Fire"
Arctic Monkeys: "Whatever People Say I Am, That's What I'm Not"
Radiohead: "In Rainbows"
Moby: "Play"
Kinky: "Reina"
Nirvana: "Nevermind"
Kings of Leon: "Come Around Sundown"
Snow Patrol: "Fallen Empires"
Fede
Red Hot Chili Peppers: "Californication"
Muse: "Showbiz"
The Strokes: "Is This It"
Kasabian: "West Ryder Pauper Lunatic Asylum"
Arctic Monkeys: "Whatever People Say I Am, That's What I'm Not"
Luego de un generoso 2011 que dejó musica en cantidad y calidad, comienza a tomar la posta el 2012, el año del fin del mundo (somos románticos, déjennos creerlo), y asoman sus primeros hijos. Acá dejo algo de lo que se viene, incluyendo los esperados regresos y la interesante aparición de la enigmática Grimes. Por los pagos de Alpha Beta Gaga se viene probablemente un año más errático que de costumbre, ya que estas manos han comenzado a participar por otros medios y a esto se suma la inevitable mutación interior de nosotros los responsables del blog. A esto, los que ya han leído el blog antes (o basta con sólo ver entradas viejas) ya lo habrán notado con el correr de las entradas: cambios en la forma de escribir, en la música que se escucha, en la óptica hacia las cosas en general. No sabemos si se trata de un crecimiento, preferimos referirnos más bien a una mutación; a un giro inevitable por una cadena que amalgama, de manera un tanto sádica, la lógica con el azar. Somos uno sólo y mutamos al unísono; somos Loomer, Oposigual, Melvin Bromsby; tan parecidos y opuestos, unidos en el caos y por el caos, con la música como nuestro fiel transporte hacia un lugar mejor: exactamente donde sea que tengamos ganas de estar.
Loomer - Oposigual - Melvin Bromsby
Surfing on a Rocket
Le Voyage Dans la Lune
Nuestros queridísimos Nicolas Godin y Jean-Benoit Dunckel tienen un disco nuevo listo para ser lanzado (6 de Febrero), inspirado en la película muda de 1902 del mismo nombre. El dúo se encargó de restaurar el film para usarlo en las giras. Por el adelanto que nos ofrecen; es una locura. Le Voyage Dans la Lune contará con Victoria Legrand (Beach House) y las Au Revoir Simone como invitadas. El dúo ofreció dos adelantos: "Seven Stars",vocalizada por Legrand y "Sonic Armada" (esta última esta acompañada de un video que incluye imperdibles imágenes del film restaurado).
Cat Power
Por otro lado, la bella Chan Marshall, otra de nuestras queridas, anunció via twitter que finalmente lanzaría este año The Sun, disco cuyo lanzamiento se viene dilatando desde hace años. Junto a la noticia, Chan lanzó a beneficio una canción nueva, con video incluído.
The Shins
Tipo jodido y perfeccionista, por sobre todas las cosas, es James Mercer. Al punto que de un día al otro decidió echar a los demás miembros de The Shins y rearmar la banda a su gusto. Lo cual nos advierte un disco con más sabor a Mercer solista que otra cosa. Y la primera evidencia aparece en Simple Song, que se aleja un poco de lo característico de los Shins para abrazar un sonido más exhuberante, ambicioso, alla Arcade Fire manteniendo, no obstante, el costado pop hiper melodioso que Mercer maneja tan bien. En fin, pasaron 5 años del genial Wincing the Night Away y pronto se cumpliran 2 de Broken Bells (otro gran logro). ¿Qué nos traera James Mercer en Mayo con Port of Morrow? Acá va un adelanto:
The XX
Los hijos del silencio anunciaron el lanzamiento de su segundo disco para este año. Toda una prueba para los chicos, ya que seguro tendrá pendiente al grueso de los medios musicales luego del ruido del éxito de su debut homónimo. Ya lanzaron un adelanto, es sólo un demo, pero adelanto al fin:
Grimes
Claire Boucher es la gran promesa. De la escuela de Fever Ray (una querida más de este blog y van...) hace una especie de electrónica mitad bailable/mitad cuelgue bastante oscura, con su voz fantasmagórica de niña sobrevolando los sombríos paisajes de su música, que tiene también algo mendigado a los '80, como casi todo lo que tenemos hoy en día. Acá van dos adelantos de Visions, su disco debut que será lanzado bajo el ala protectora del sello 4AD.
Genesis
Oblivion
Atención que este año se vienen también discos de Leonard Cohen, MGMT, Spiritualized, Grizzly Bear y OutKast, entre otros.